Por la caída de las ventas minoristas, el 35 % de los comerciantes dice que su situación empeoró

De acuerdo con la Confederación Argentina de la Mediana Empresa (CAME), en agosto las ventas minoristas de las pymes cayeron 2,6 % interanual a precios constantes y 2,2 % respecto a julio en la serie desestacionalizada.

Con excepción de marzo, que había mostrado un ínfimo repunte del 0,1 %, todos los meses de 2025 reflejaron bajas, lo que configura una tendencia preocupante para un sector que sostiene buena parte del empleo en el país. No obstante, al comparar con el mismo período del año pasado, el balance enero-agosto todavía arroja un crecimiento del 6, 2%, explicado más por la muy baja base de comparación que por un verdadero impulso sostenido de la demanda.

Los comerciantes encuestados por CAME reflejan un panorama de expectativas mixtas. El 55 % consideró que su situación se mantuvo estable respecto a 2024, mientras que el 35 % dijo que empeoró, cinco puntos más que en la medición anterior. Mirando hacia 2026, casi la mitad (49 %) espera una mejora, aunque también aumentó el grupo de quienes prevén un deterioro, que ya llega al 9 %.

En ese escenario, las fechas especiales como el Día del Niño aportaron oxígeno, pero no alcanzaron a revertir la tendencia. Las ventas presenciales predominaron sobre las digitales y el peso de las promociones y planes de pago volvió a ser decisivo para atenuar, en parte, la retracción del consumo. Y es que presión tributaria, la falta de crédito accesible y la volatilidad económica derivaron en estrategias defensivas de los comercios, que priorizaron liquidez, achicaron stocks y postergaron decisiones de inversión.