«La apertura de las importaciones significa bajarle impuestos a los chinos antes que a los argentinos»

El gobierno nacional le puso el traje de villano a la industria nacional. Aunque no fue el único que lo hizo en los últimos 50 años, ha sido el que con más énfasis y rapidez aplicó esas políticas – pese a las promesas de campaña de hacerlo en el mediano plazo para permitir que las empresas se adapten – que mes a mes descomponen el tejido productivo del país con las consecuencias sociales que provoca y de las que cuesta mucho recuperarse.
Uno de los sectores industriales más afectados es el textil que está presente en 17 provincias argentinas, tiene registradas 23.986 empresas, invirtió 1.400 millones de dólares en los últimos años y genera 530 empleos, el 69% de ellos ocupados por mujeres, de acuerdo con la información que brinda la Fundación Pro Tejer, cuya misión es asistir, desarrollar, contener e integrar a la cadena de valor agroindustrial textil y de confecciones de la Argentina.
Luciano Galfione, presidente de la Fundación, describió la situación por la que atraviesa el sector, explicó por que la indumentaria en Argentina, aunque también la importada, es más cara que en otros países e insistió en la necesidad de sentarse todas las partes en una mesa para mejorar la cadena textil.
«Estamos atravesando una situación complicada producto fundamentalmente de dos cosas: la caída del poder adquisitivo de la población que hace que prioricemos los consumos esenciales que necesitamos para vivir como puede ser la comida, los servicios públicos, los colegios y las prepagas y releguemos la indumentarias porque podemos seguir utilizando la que ya tenemos, la que nos pasa a un amigo, un vecino, un hijo a otro; y en segundo lugar por el aumento de las importaciones producto de una decisión del gobierno que facilita el ingreso de productos importados sacándole todo control y bajándole los aranceles, lo que significa lisa y llanamente bajar los impuestos a los chinos antes que bajarnos los impuestos a nosotros, que somos quienes producimos», dice Luciano Galfione, presidente de Pro Tejer.
Fuente: El Litoral